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Zuberoa y Ajmany, los dos caballos franceses que han viajado expresamente desde el país vecino para disputar el Duque de Alburquerque, han copado esta tarde las dos primeras posiciones, separados tan sólo por un cuarto de cuerpo. El vencedor es propiedad de la cuadra Miranda de Luis Morgado, que la semana pasada venció con otro de sus pupilos, Elderbar, en la Poule de Potros.
Once eran los aspirantes en esta cita de 2.000 metros y 24.000 euros de dotación para el propietario ganador. Y los dirigió Zuberoa al poco de la salida, bajo los brazos del jockey vitoriano Óscar Ortiz de Urbina y al ritmo que más le convenía. Ajmany le vigiló de cerca pero luego no le pudo dar caza, pues llegada la recta final el hijo de Elusive City dio un tirón y ganó un par de cuerpos que resultaron vitales para cruzar la meta con una mínima ventaja. Arguero fue un buen tercero en lucha con su compañero de patio Checo (ambos son pupilos del preparador Guillermo Arizkorreta), mientras que la reaparición de Flanders Flame, el ganador de la Poule y Copa de Oro en 2016, pasó sin pena ni gloria (terminó noveno).
Ortiz de Urbina ya había ganado en la primera de la reunión, a lomos de Qum Ram en un sprint de 1.200 metros en línea recta. Luego venció de manera prometedora Karlsburg, con el portugués Marino Gomes. En los hándicaps triunfaron Bank Guarantée, con el jockey José Luis Martínez, Céfiro, con el joven jinete Víctor Valenzuela, y Tremendista, montado por Jaime Gelabert. Y en una cita para jinetes aficionados, César Alonso hijo sumó su tercer primer puesto, el primero en Madrid, a lomos de Alternativas.
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